Grupos de apoyo: Tipos, beneficios y qué esperar

¿Qué es un grupo de apoyo?

Un grupo de apoyo es una reunión de personas que enfrentan problemas comunes para compartir lo que les preocupa. Al compartir sus experiencias, pueden ofrecer apoyo, ánimo y consuelo a los demás miembros del grupo y recibir lo mismo a cambio.

Cuando pasa por un momento difícil o traumático, sus familiares y amigos pueden simpatizar con usted, pero no siempre saben qué decir o cuál es la mejor forma de ayudarle. A veces, los médicos y los especialistas de la salud pueden ofrecer un pequeño apoyo emocional, pero su enfoque principal es siempre médico.

Los grupos de apoyo se crearon para reunir a personas que se enfrentan a circunstancias difíciles similares. Puede tratarse de una afección médica específica como cáncer o demencia, un problema de salud mental como depresión, ansiedad, duelo o adicción o el cuidado de un familiar o amigo que se enfrenta a alguno de estos problemas. Sea cual sea el problema al que usted o un ser querido se enfrente, la mejor medicina suele ser la voz de personas que han estado en su lugar.

Un grupo de apoyo ofrece un lugar seguro donde puede obtener información práctica, constructiva y útil. Recibirá apoyo y aprenderá más sobre cómo afrontar sus problemas mediante sus experiencias compartidas. Además, escuchar a otras personas que se enfrentan a retos similares puede hacer que se sienta menos solo en sus dificultades.

Aunque es perfectamente normal sentirse renuente, ansioso o aprensivo sobre unirse a un grupo de apoyo, puede ser útil desvanecer algunos de los mitos e ideas erróneas comunes sobre estos grupos y su funcionamiento.

Mitos y percepciones erróneas sobre los grupos de apoyo

En algunos círculos, sigue existiendo un estigma asociado a los problemas de salud mental, que se extiende a asistir a grupos de apoyo para esos problemas. Algunas personas consideran que acudir a los demás es una señal de debilidad, mientras que otras creen que confiar en los demás es una pérdida de tiempo y que no se consigue nada.

Otros mitos y percepciones erróneas comunes sobre los grupos de apoyo incluyen:

Tipos de grupos de apoyo

Según sus necesidades, puede decidir unirse a uno de estos tres tipos de grupos de apoyo: un grupo de apoyo mutuo, un grupo de ayuda de 12 pasos o un grupo terapéutico. Solo recuerde que, sea cual sea el grupo de apoyo que elija, no sustituye a la atención médica.

Grupos de apoyo mutuo

Los grupos de apoyo mutuo son grupos dirigidos por los participantes. Los moderadores reciben formación, pero no asesoran ni actúan como especialistas. Los participantes en un grupo de apoyo mutuo pueden ser personas que están enfrentando una determinada afección o circunstancia, ya sea un problema médico, maltrato en el hogar, duelo o trastorno del estado de ánimo. Otros grupos de apoyo están diseñados para dar apoyo a los familiares o amigos de alguien que vive una situación difícil.

Los miembros del grupo comparten lo que les funciona e inspiran a otros a hacer lo mismo. Los grupos de apoyo mutuo normalmente no tienen costo.

Grupos de autoayuda de 12 pasos

Los programas de 12 pasos suelen estar dirigidos a personas con una adicción, como al alcohol, las drogas, el juego o el sexo. Durante las reuniones grupales, los participantes siguen los 12 pasos para la recuperación creados por Alcohólicos Anónimos.

Al igual que los grupos de apoyo mutuo, los participantes dirigen los grupos de autoayuda de 12 pasos, son gratuitos y con frecuencia ofrecen grupos separados para los seres queridos de quienes tienen la adicción.

Grupos terapéuticos

A diferencia de los grupos de apoyo mutuo y los programas de 12 pasos, los proveedores de salud mental dirigen los grupos terapéuticos. Un terapeuta profesional reúne a varias personas que viven condiciones similares y les proporciona un tratamiento en grupo.

Hay grupos terapéuticos disponibles para una amplia variedad de afecciones de salud mental. Es posible que el grupo terapéutico tenga un costo, pero puede estar cubierto por su seguro médico.

[Lea: Cómo encontrar un terapeuta que le ayude a sanar]

Grupos de apoyo en línea

Como la terapia en línea, los grupos de apoyo en línea pueden ser una alternativa útil y cómoda a las reuniones presenciales. Son una gran alternativa si la distancia es demasiado grande, no hay transporte disponible o su horario laboral o familiar le impide asistir a un grupo de apoyo presencial. Los grupos de apoyo en línea también pueden funcionar bien para quienes padecen una enfermedad poco frecuente y sus pares están repartidos por muchos lugares. Algunas plataformas incluso aceptan seguros.

Por supuesto, el formato del grupo de apoyo en línea tiene algunas desventajas. Puede ser más difícil para los participantes interpretar las expresiones faciales y el lenguaje corporal de los demás. Además, la falta de contacto cara a cara puede disminuir la comunicación, la cual es fundamental para la participación en un grupo de apoyo. Un foro en línea también puede limitar el grado en que los participantes son capaces de expresar calidez a los demás del grupo.

Como en cualquier reunión en línea, siempre existe el riesgo de que surjan problemas técnicos o de que los participantes se distraigan, lo que puede ser especialmente problemático si alguien está compartiendo una historia delicada.

Beneficios de los grupos de apoyo

Un grupo de apoyo es un lugar seguro donde puede hablar de sus emociones y circunstancias con otras personas que saben cómo se siente y que no le juzgarán ni criticarán. También puede ayudarle a:

Aprender mejores estrategias de afrontamiento. A medida que atraviesa circunstancias difíciles, es posible que necesite aprender nuevas formas para afrontarlas. En un grupo de apoyo, aprenderá habilidades de afrontamiento de personas que las han utilizado con éxito. Podría recibir consejos para meditar, escribir un diario o hacer cosas que de otro modo no habría considerado. También podría aprender nuevas formas de establecer límites saludables y funcionar mejor.

Crecer a través de las experiencias compartidas. Un grupo de apoyo le brinda oportunidades para desahogarse. Compartir sus propias experiencias con el grupo puede aliviar su carga emocional y sus sentimientos de aislamiento. Cuando otros miembros del grupo comparten sus historias, puede obtener ideas valiosas sobre cómo otros afrontan situaciones similares.

Centrarse en el autocuidado. Los participantes del grupo de apoyo pueden aportar ideas innovadoras para cuidarse a sí mismo, controlar el estrés, combatir la fatiga y sentirse más fuertes mental y físicamente.

Mantener la esperanza. Estar rodeado de sus compañeros del grupo de apoyo puede ayudarle a levantar su estado de ánimo y optimismo y proporcionarle reservas emocionales para visualizar un mejor futuro de forma realista.

Qué esperar de un grupo de apoyo

Cada grupo de apoyo funciona un poco diferente, por lo que no siempre es fácil saber si un grupo en específico será adecuado para usted. Pero hay algunas cosas que debe tener en cuenta al evaluar sus opciones:

El grupo de apoyo tiene reglas claras sobre quién puede asistir. Según el grupo, podría estar limitado a un sexo específico, a mayores de 18 años, a personas que se enfrentan a un reto específico o a los amigos y familiares de quienes padecen una determinada aflicción. Relativamente pocos grupos de apoyo están abiertos a cualquier persona.

El moderador le hace sentir cómodo. Los moderadores experimentados anticipan que los recién llegados estarán nerviosos por asistir al grupo. Harán todo lo posible por calmar sus miedos dándole la bienvenida, asegurándole que está en el grupo adecuado y explicándole qué es lo que puede esperar.

El grupo de apoyo tiene algún tipo de estructura. Por lo general, el grupo debe tener un programa claro con cuatro elementos básicos: el moderador da la bienvenida a todos, cada participante tiene la oportunidad de presentarse, una conversación en grupo y el moderador anuncia formalmente el final de la reunión del grupo.

Existen pautas claras. Las reglas y las expectativas son importantes para ayudar a que todos se sientan seguros en el grupo. Es común que los grupos pongan un límite de tiempo de 1 a 2 minutos por participante para evitar que alguien acapare la conversación. Con frecuencia, los grupos de apoyo tienen una «regla de paso» si alguien no se siente con ánimos de compartir. Se les debe recordar a los miembros del grupo que sean respetuosos, empáticos y mantengan una absoluta confidencialidad.

El moderador ayuda al grupo a mantenerse enfocado. Independientemente de que el moderador sea un especialista o no, debe esperar que esté capacitado y sea competente. Los moderadores competentes saben poner límites y respetar el programa, así como darle a cada participante la oportunidad de hablar. Son de gran ayuda para enlazar temas de interés común para el grupo e inspirar las conversaciones más productivas. Las emergencias pueden surgir, y de hecho sí surgen, durante las reuniones de grupo y los moderadores deben saber cómo manejarlas adecuadamente.

Algunos grupos de apoyo dirigidos por los participantes en ocasiones invitan a conferencistas. Son oportunidades para que los miembros del grupo reciban información de médicos, terapeutas, especialistas u otros profesionales que ayude a instruir al grupo sobre un tema determinado.

Notificaciones obligatorias y confidencialidad

En general, todo lo que se comparte dentro del grupo debe quedar dentro del grupo. Sin embargo, algunos moderadores o miembros del grupo pueden estar obligados a informar. Esto significa que están legalmente obligados a informar los delitos de los que se enteran, como los abusos, incluso durante una conversación confidencial del grupo. Algunos profesionales certificados también están obligados a informar sobre amenazas de suicidio y amenazas de daño físico inminente a otras personas.

En algunos grupos de apoyo, las reglas exigen que las personas obligadas a informar anuncien este hecho al grupo antes de que empiece la reunión, pero no siempre es así.

Señales de alerta de un grupo de apoyo improductivo

La conversación de un grupo de apoyo debe ser útil y productiva. Si algo le parece fuera de lugar, probablemente lo esté. Algunas señales de alerta que indican que el grupo de apoyo puede no ser el adecuado para usted incluyen:

El moderador carece de habilidades y formación. Es esencial que los moderadores controlen sus reuniones. No deben permitir que nadie del grupo tome el control o acapare el tiempo del grupo. Deben tener claras las pautas del grupo y estar dispuestos a hacerlas cumplir. Por ejemplo, no deben permitir faltas de respeto ni que se compartan consejos médicos. Tampoco deben ocupar todo el tiempo del grupo para compartir sus propios problemas, dejando poco o ningún tiempo para que los demás compartan.

El grupo es demasiado grande. El tiempo pasa rápido durante una reunión del grupo de apoyo. Si es demasiado grande, no todos los participantes tendrán la oportunidad de compartir y beneficiarse de lo que comparten los demás. Por lo general, funciona mejor un grupo de apoyo de diez o menos miembros.

La regla de confidencialidad no se aplica consistentemente o en absoluto. Los miembros del grupo a menudo comparten muchos temas delicados en la reunión de apoyo. Es esencial que los moderadores impongan la confidencialidad en las reuniones del grupo para que todos los participantes se sientan seguros. Se debe disuadir a los miembros de participar en grupos de mensajes de texto, chats y redes sociales fuera del grupo, donde las conversaciones no son moderadas y pueden llegar a ser irrespetuosas. No debe permitirse que estudiantes u otros observadores presencien o graben al grupo con fines educativos o de otro tipo.

El objetivo principal es promocionar un producto o servicio. Es común que organizaciones sin fines de lucro u otros grupos patrocinen grupos de apoyo. Si piden cuotas elevadas para inscribirse o promocionan productos o servicios (como medicamentos o servicios terapéuticos), el patrocinador puede tener una motivación equivocada y el grupo puede no ser tan eficaz.

El grupo siempre termina con un tono sombrío. A veces, las conversaciones del grupo de apoyo pueden volverse pesadas y disminuir la energía del grupo. Un moderador hábil encuentra formas de elevar la energía del grupo antes de que termine la reunión, para que todos se sientan esperanzados y optimistas.

Cómo superar los obstáculos psicológicos para unirse a un grupo de apoyo

Es difícil y emocionalmente agotador sobrellevar un problema grave como una adicción, un duelo, el síndrome de desgaste emocional, la depresión u otro problema de salud mental. Para algunas personas, es aún más difícil pedir ayuda y estar dispuestas a recibirla. La mitad de la lucha de asistir a un grupo de apoyo consiste en cruzar la puerta por primera vez.

Es normal sentirse nervioso, asustado o incluso avergonzado. Unirse a un grupo de apoyo significa reconocer y aceptar que el problema al que se enfrenta es real, que ya no puede evitar enfrentarlo y que necesita ayuda. Puede ser difícil aceptar estas cosas, pero hay formas de superar los obstáculos que le impiden dar el primer paso.

• No tiene nada que perder si le da una oportunidad a un grupo de apoyo. Las personas que están sentadas del otro lado de la puerta alguna vez sintieron lo mismo que usted.
• Probablemente hará nuevos amigos que serán más comprensivos con sus circunstancias actuales que algunos de sus familiares y amigos más cercanos.
• Si tiene miedo de ir solo, considere pedirle a un amigo de confianza que le acompañe para darle apoyo moral. Después de las primeras reuniones, seguro se sentirá más tranquilo.

Cómo aprovechar al máximo un grupo de apoyo

Hay algunas cosas que puede hacer para aprovechar al máximo el unirse a un grupo de apoyo.

Asista con regularidad. Aprovechará al máximo un grupo de apoyo si asiste con regularidad. Le ayudará a familiarizarse con los demás miembros del grupo y a aumentar su nivel de comodidad.

Participe en las conversaciones. Participar en un grupo hace que la conversación fluya y que todos participen. Los demás participantes querrán escuchar sus novedades y todas las palabras de sabiduría que quiera compartirles.

Sea sensible con los demás miembros del grupo. Siempre existe la posibilidad de que surja algo durante la reunión que le moleste o enfade. Sea consciente de que las personas que asisten a los grupos de apoyo están enfrentando problemas serios, delicados y con carga emocional. Si no puede ignorarlo, comuníqueselo al moderador y dele la oportunidad de resolverlo.

Reconozca cuando un grupo no es el adecuado. Un grupo de apoyo productivo depende mucho de la dinámica del grupo. Con la entrada y salida de diferentes personas, la dinámica del grupo puede cambiar. Si las cosas no funcionan, podría considerar cambiar a otro grupo de apoyo.

Recuerde los motivos por los que se unió

Cuando sienta que las cosas no podrían estar peor, un grupo de apoyo puede ayudarle a replantear sus problemas y verlos desde una perspectiva más positiva. Uno de los mejores pasos que puede dar para sentirse mejor es reunir el valor para identificar un grupo de apoyo adecuado y empezar a asistir.

Sabrá que ha dado el paso correcto cuando sienta que tiene algo en común con los demás miembros del grupo y que les ha aportado algo también. Y lo más importante, podrá considerar un éxito su experiencia cuando salga del grupo pensando: «Me siento mejor ahora que cuando llegué».