Cómo enfrentar las dificultades y la adversidad
Últimamente, el mundo parece estar tambaleándose de una crisis a otra. Experimentamos una pandemia global, cambios drásticos en nuestras vidas cotidianas, incertidumbre económica, crisis políticas y sociales, así como una variedad de desastres naturales. Luego están los traumas personales que también enfrentan las personas, como la pérdida de un ser querido, el deterioro de la salud, el desempleo, un divorcio, un delito violento o accidentes trágicos. Para muchos de nosotros, es un momento de dificultad y conmoción sin precedentes.
Independientemente de si la fuente de perturbación en su vida es una emergencia global o una tragedia personal, o ambas, vivir momentos difíciles puede tener un gran impacto en su estado de ánimo, salud y perspectiva. Puede hacer que se sienta impotente y abrumado por el estrés y la ansiedad. Es posible que esté en duelo por todo lo que perdió, abrumado por una serie de emociones difíciles o conflictivas, o que le parezca incierto cómo seguir adelante con su vida. Es posible que incluso sienta que su vida está totalmente fuera de control y que no tiene poder sobre lo que sucederá después.
Aunque no hay manera de evitar el dolor, la adversidad o la angustia en la vida, hay maneras para ayudar a calmar las aguas turbulentas y retomar un sentido de control. La resiliencia es la capacidad para sobrellevar la pérdida, los cambios y el trauma que han sido partes inevitables de la vida, incluso antes de estos tiempos extraordinarios. Aumentar la resiliencia puede ayudarle a adaptarse mejor a los eventos que cambian la vida, sobrellevar los tiempos difíciles y recuperarse de las dificultades y tragedias.
El papel de la resiliencia en tiempos de crisis
¿Por qué algunas personas parecen ser más capaces de sobrellevar los tiempos difíciles que otras? Aunque la situación de todas las personas es diferente, es cierto que las personas con resiliencia tienden a tener una mayor tolerancia a la angustia emocional que generan los tiempos difíciles. Mientras más resiliente sea, mejor podrá tolerar los sentimientos de estrés, ansiedad y tristeza que acompañan al trauma y a la adversidad, e incluso hallar una manera de recuperarse de los contratiempos.
[Lea: Cómo afrontar eventos traumáticos]
Todos pasamos por tiempos difíciles, todos experimentamos decepciones, pérdidas y cambios, y todos nos sentimos tristes, ansiosos y estresados en diferentes momentos de nuestras vidas. Pero aumentar la resiliencia puede ayudarle a mantener una perspectiva positiva, enfrentarse a un futuro incierto con menos miedo y sobrevivir incluso los días más oscuros.
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Cómo aumentar la resiliencia
Si es más sensible a la angustia emocional y se le complica sobrellevar las dificultades o la adversidad, es importante no pensar que esto es algún tipo de defecto de carácter. La resiliencia no es una cualidad de las personas fuertes y no es algo fijo, es un proceso continuo que requiere un esfuerzo para aumentarla y mantenerla a lo largo del tiempo.
A menos que se haya enfrentado a la adversidad antes en su vida, es poco probable que haya tenido la necesidad u oportunidad de aumentar la resiliencia. Reflexionar sobre las experiencias del pasado puede ayudarle a sobrellevar los desafíos que enfrenta actualmente. Incluso si tuvo dificultades para enfrentar la adversidad en el pasado, es posible que al menos pueda reconocer algunas de las formas de afrontamiento que NO ayudan, como intentar entumecer sus sentimientos con drogas o alcohol.
Aunque con frecuencia es difícil imaginar que algo bueno pueda surgir de las experiencias traumáticas, aumentar la resiliencia puede ayudarle a encontrar cualquier aspecto positivo en las dificultades a las que se ha enfrentado. Sobrevivir las dificultades puede enseñarle cosas importantes sobre sí mismo y el mundo que le rodea, fortalecer su determinación, aumentar su empatía y, con el tiempo, permitirle evolucionar y crecer como ser humano.
Aumentar la resiliencia también puede ayudarle con lo siguiente:
- Mantenerse concentrado, flexible y productivo en tiempos buenos y malos.
- Sentir menos miedo ante las experiencias nuevas o un futuro incierto.
- Gestionar y tolerar emociones fuertes fuera de su zona de confort, incluso aquellas que preferiría evitar como la ira o la angustia.
- Fortalecer sus relaciones y mejorar sus habilidades de comunicación, en especial bajo presión.
- Mejorar su autoestima.
- Tener la seguridad de que eventualmente encontrará una solución a un problema, incluso si no es evidente de inmediato.
Puede desarrollar y mejorar estas cualidades de resiliencia en cualquier momento, sin importar su edad, antecedentes o circunstancias. Los siguientes consejos pueden ayudarle a enfrentar dificultades con más seguridad, enfrentar mejor estos momentos difíciles y sobrevivir para llegar a los días más alegres que están por venir.
Consejo 1 para aumentar la resiliencia: Practique la aceptación
Aunque todos reaccionamos a eventos estresantes de manera diferente, muchos de nosotros intentamos protegernos a nosotros mismos negándonos a aceptar la verdad de lo que está sucediendo. Después de todo, al negar incluso que está experimentando una crisis, puede engañarse a sí mismo para creer que aún tiene un sentido de control sobre lo que normalmente se considera eventos incontrolables.
Aunque la negación puede tener algunas funciones positivas, por ejemplo, puede darle una oportunidad para aceptar la conmoción de un evento traumático, con el tiempo, solo prolongará su dolor. Mantenerse en negación impedirá que se adapte a sus nuevas circunstancias, busque soluciones o tome medidas y reprimirá el proceso de sanación.
Acepte la situación
El cambio es una parte inevitable de la vida y muchos aspectos de este mundo cambiante están fuera de su control individual. No puede controlar la propagación de un virus, por ejemplo, el ritmo del cambio social o la forma en que la economía se comporta. Aunque puede ser difícil reconocerlo, luchar contra eventos o circunstancias fuera de su control solo le drenará la energía y lo dejará sintiéndose ansioso y desesperanzado. En cambio, aceptar su situación puede liberarlo para dedicar su energía a las cosas sobre las que sí tiene control.
Enfóquese en las cosas que sí pude controlar. Haga una lista de todas las cosas que no puede controlar y dese permiso para dejar de preocuparse por ellas. En cambio, enfóquese en las acciones que sí puede tomar. Si está desempleado, no puede controlar si el trabajo ideal aparecerá en los anuncios o si una empresa le otorgará una entrevista. Pero puede controlar cuánto tiempo y esfuerzo dedica a buscar trabajo o mejorar sus habilidades. De manera similar, si un ser querido se enfrenta a una enfermedad que amenaza la vida, es posible que deba renunciar al control en favor de los expertos médicos, pero, aun así, puede enfocarse en dar a su ser querido todo el apoyo emocional posible.
Acepte el cambio reflexionando sobre su pasado. Recordar momentos en los que se enfrentó a la incertidumbre y al cambio con anterioridad puede ayudarle a aceptar su situación actual. ¿Quizá sufrió una ruptura dolorosa en el pasado y eventualmente pudo seguir adelante con su vida o se quedó sin trabajo y terminó encontrando uno mejor? Reflexionar sobre los éxitos del pasado también puede ayudarle a ver más allá de la crisis actual y obtener un poco de seguridad sobre que podrá salir adelante de nuevo.
Acepte sus sentimientos
Es tentador creer que la mejor forma de salir adelante en tiempos difíciles es ignorando las emociones dolorosas y “poniendo una buena cara”. Pero las emociones desagradables existen, ya sea que elija reconocerlas o no. Intentar evitar que sus emociones surjan solo aumentará el estrés, retrasará su aceptación de la nueva situación e impedirá que siga adelante.
Al permitirse sentir las emociones, descubrirá que incluso los sentimientos más intensos y molestos pasarán, el trauma de estos momentos difíciles comenzará a desvanecerse y podrá encontrar el camino a seguir. Hable con alguien en quien confíe sobre lo que está experimentado o use el Kit de herramientas de inteligencia emocional de HelpGuide para reconectar con sus emociones.
Permítase vivir el duelo de sus pérdidas
Vivir tiempos difíciles por lo general implica un tipo de pérdida. Ya sea la pérdida de un ser querido, de un empleo o de su vida anterior, es importante permitirse la oportunidad de vivir el duelo. Solo al enfrentarse a su duelo, reconociendo y lamentando sus pérdidas, podrá sanar y, eventualmente, seguir adelante con su vida.
Consejo 2: Acérquese a los demás
Conectar con amigos y familia cuando está pasando por momentos difíciles puede ayudar a aliviar estrés, mejorar su estado de ánimo y dar sentido a todos los cambios y las perturbaciones. En lugar de sentir que está enfrentando sus problemas solo, puede obtener fortaleza y aumentar la resiliencia al tener en quién apoyarse.
No es necesario que las personas con quienes se relacione tengan las respuestas a los problemas que enfrenta, solo necesitan estar dispuestas a escucharlo sin juzgar. De hecho, lo que diga o las palabras usadas con frecuencia no son importantes. Es la conexión humana, el contacto visual, una sonrisa o un abrazo lo que puede hacer toda la diferencia en cómo se siente.
Priorice las relaciones. Nada tiene los mismos beneficios de salud que relacionarse cara a cara con alguien que sea atento y comprensivo. Sin embargo; hoy en día, no siempre es posible ver a nuestros amigos y seres queridos en persona. Si está alejado por la geografía, la cuarentena o restricciones de viaje, por ejemplo, acérquese a los demás por teléfono, chat por video o redes sociales.
No se aleje de los demás en tiempos difíciles. Es posible que sea propenso a refugiarse en sí mismo cuando se enfrenta a desafíos en la vida. Es posible que tenga miedo de ser una carga para sus amigos y seres queridos, o que se sienta demasiado cansado para buscar ayuda. Pero intente participar en actividades sociales, incluso si no tiene ganas. Los buenos amigos no lo considerarán una carga y tienen más probabilidades de sentirse halagados de que confíe en ellos lo suficiente como para platicarles su situación.
Intente evitar a las personas negativas. Algunos amigos son buenos oyentes, amables y comprensivos. Otros parecen solo alimentar las emociones negativas, dejándolo sintiéndose más estresado, ansioso o con pánico. Intente evitar a cualquier persona que aumente sus problemas, lo critique o lo haga sentirse juzgado.
Amplíe su red social. Aunque las relaciones son fundamentales para una buena salud mental, aumentar la resiliencia y salir adelante en tiempos difíciles, muchos de nosotros sentimos que no tenemos a quién recurrir en momentos de necesidad. Pero hay muchas maneras de crear nuevas amistades y mejorar su red de apoyo. Si sabe que otros están solos o aislados, sea la persona que tenga la iniciativa y acérquese.
Consejo 3: Invierta en el cuidado personal
Pasar por momentos difíciles puede ser mental y físicamente agotador. Estar constantemente en un estado de gran estrés puede ocasionar graves problemas de salud, afectar su sistema inmunitario y digestivo, aumentar su riesgo de sufrir ataques cardiacos y cerebrales y provocar síndrome de desgaste emocional, así como un estado de agotamiento emocional, físico y mental.
Debido a que el cuerpo y la mente están tan estrechamente conectados, invertir en el cuidado personal es una parte importante de aumentar la resiliencia y sobrevivir a tiempos de gran estrés. Cuando su cuerpo se siente fuerte y saludable, su mente también se sentirá así.
Haga suficiente ejercicio. Cuando está lidiando con un estrés crónico, es probable que lo sienta en el cuerpo. ¿Quizá sus músculos están tensos, tiene dolor de espalda o de cuello, dolores de cabeza frecuentes, insomnio, acidez o malestar estomacal? Hacer ejercicio regular no solo libera endorfinas potentes en el cerebro para mejorar su estado de ánimo, también puede ayudar a aliviar la tensión en el cuerpo y contrarrestar los síntomas físicos de estrés.
Practique una técnica de relajación de “mente y cuerpo”.Las prácticas como yoga, taichi y meditación combinan la respiración profunda y la conciencia corporal para ayudarle a aliviar el estrés y equilibrar su sistema nervioso. Pruebe alguna de las meditaciones por audio de HelpGuide para mejorar su bienestar físico y emocional.
[Escuche: Meditación de la fuerza interior]
Mejore su sueño. Al enfrentarse a la adversidad, nada agota su resiliencia más que perderse de una noche de sueño reparador. Con frecuencia, mejorar sus hábitos durante el día y tomarse un tiempo para relajarse y descansar antes de acostarse puede ayudarle a dormir mejor por la noche.
Coma bien. No hay alimentos específicos que puedan ayudar a aumentar la resiliencia y sobrevivir a los tiempos difíciles. En cambio, su patrón dietético general es lo importante. Comer muchos alimentos procesados y comida para llevar puede tener un impacto en su cerebro y estado de ánimo, agotando su energía y debilitando su sistema inmunitario. Por otro lado, una dieta saludable, que sea baja en azúcar y rica en grasas saludables, puede darle la energía y concentración para abordar los desafíos a los que se enfrenta.
Controle sus niveles de estrés en general. Tomar medidas para controlar su estés en general puede romper el dominio que este tiene sobre su vida, mejorar su estado de ánimo y ayudarle a aumentar la resiliencia que necesita para sobrellevar la presión en este momento.
Consejo 4: Busque un significado y propósito
Es fácil abrumarse por titulares aterradores o consumirse por la crisis a la que se enfrenta. Pero, sin importar sus circunstancias, esto no tiene por qué definirle como persona. Usted no es su crisis. Al hacer actividades que aporten un propósito y significado a su vida, puede mantener sus problemas en perspectiva, prevenir que lo abrumen y mantener su identidad.
Todos somos diferentes, por lo que tenemos formas distintas de experimentar el propósito y el significado. No se limite por las expectativas de los demás, busque hacer actividades que sean importantes para usted y agreguen satisfacción a su vida.
Ayude a los demás. Cuando está en medio de una crisis, es común sentirse impotente y desesperanzado. Al ayudar a los demás de manera proactiva, puede retomar su sentido de control, así como encontrar su propósito en la vida. De hecho, dar apoyo puede ser igual de benéfico que recibir apoyo. Intente ofrecer su tiempo como voluntario, ayudando a los demás en su vecindario, donando sangre, donando a una organización benéfica o participando en una marcha de una causa que sea importante para usted.
Practique sus pasatiempos e intereses. En tiempos difíciles, es importante no dejar a un lado los intereses que nutren su alma. Para muchos de nosotros, estas cosas son las que nos definen como personas y aportan sentido a nuestras vidas. Ya sea jugar un deporte, cuidar de una mascota, una actividad artística o musical, proyectos de mejoramiento del hogar o pasar tiempo en la naturaleza, continuar encontrando placer en sus pasatiempos aumenta su capacidad para sobrellevar el estrés en tiempos difíciles.
Consejo 5: Manténgase motivado
Una parte importante de enfrentar la adversidad y sobrevivir a los tiempos difíciles es fomentar las cualidades de perseverancia y resistencia. Los tiempos difíciles no duran para siempre, pero, por su propia naturaleza, rara vez terminan pronto. Conforme avance por la oscuridad, necesitará encontrar formas para mantener la motivación y la perseverancia.
Enfrente sus problemas un paso a la vez. Si un problema es demasiado grande para abordarse de inmediato, divídalo en pasos más pequeños y manejables. Si su problema no parece tener solución, aun así, puede tomar medidas creando una lista, investigando más sobre el tema o buscando consejos de un amigo o ser querido en quien confíe.
Celebre las pequeñas victorias. Para mantenerse motivado y positivo mientras navega por los mares tormentosos de la vida, tómese un momento para disfrutar los pequeños logros. Si está en búsqueda de trabajo, por ejemplo, obtener una entrevista no es tan significativo como conseguir un trabajo, pero es una señal de progreso, un paso en la dirección correcta. Notar estos pequeños logros puede darle un respiro de todo el estrés y la negatividad a los que se enfrenta y motivarle para seguir adelante.
[Lea: Cómo encontrar alegría en tiempos difíciles]
Intente mantener una perspectiva optimista. Aunque es difícil mantenerse optimista y lleno de esperanza en medio de una crisis, muchos de nosotros tendemos a exagerar nuestros problemas y hacer que parezcan más negativos de lo que realmente son. Intente dar un paso atrás y analizar su situación como una persona externa. ¿Hay rayos de luz en los que pueda enfocarse? En lugar de preocuparse sobre lo que teme que pueda suceder, intente visualizar lo que le gustaría que sucediera.
Exprese gratitud. Puede sonar trillado, pero incluso al experimentar tiempos difíciles, por lo general, es posible encontrar una cosa por la cual puede estar agradecido, el amor de una mascota, por ejemplo, un atardecer hermoso o un amigo atento. Tomarse un momento para reconocer su gratitud por las cosas pequeñas puede brindarle un descanso del estrés y realmente mejorar su estado de ánimo.
Sea amable consigo mismo. Todas las personas se ajustan al cambio y a la conmoción de manera diferente. No critique sus habilidades de afrontamiento ni se castigue por cualquier error que cometa. La autocompasión es una parte importante de aumentar la resiliencia, así que sea amable consigo mismo.
Última actualización o revisión el julio 3, 2024